lunes, 28 de abril de 2014

Segundos

En el misterio de tus manos,
me pierdo en el laberinto de tus líneas.

Misterio

Hombre

Caricia repartida entre sueño y realidad,
segundos que queman mi piel.

A Josecito

Entre el dolor y el espanto
tu rostro aparece como un poema
de Neruda, frágil y sentido.

Te siento entre mis brazos
palpitando vida, silencio, amor.

Tus latidos se esparcen en el pasillo,
solos, te abrazo para que no tiembles
y en nuestros sueños, juntos
bajo el pequeño árbol del jardín,
nos sentamos a escuchar
 a una guitarra cantar.


Guitarra VI

Sus pequeños dedos
palpan suavemente
las cuerdas de la guitarra
frágil y pequeño
explora,
se acerca... sonríe
cual rebanada de pastel
la disfruta y saborea.

Mágicos sonidos brotan
de sus manos.

Guitarra V

Sólo tu,
podrías devolverme
la otra parte del corazón
que me hace falta.

Ahí entre las cuerdas de tu guitarra,
en esa frágil y palpable capa de piel
que cubre tu cuerpo.

Tan sólo
una mirada,
una palabra,
mi corazón tiembla.

Guitarra IV

Las palabras sumergidas
en la taza de café,
un suspiro
guardado en tu guitarra.

En la hoja de papel,
en la tinta de mi pluma,
en las pequeñas letras
de estos poemas.

Tu piel guitarra
ritmo,
melodía.

Guitarra III

Prodigio
del amanecer
sueño fugaz
que ha de desaparecer
con los primeros rayos de luz.

Tu cuerpo abrazado al mío
definitivamente 
será tuyo
mi último suspiro.

Guitarra II

María con pasos firmes,
la mirada tímida
y las manos aferradas 
a las cuerdas de la guitarra.

Sonríe
mientras sus pequeñas manos
hacen magia,
silencio, 
melodía
y un poema 
surge de la guitarra.

Guitarra I

La silla, la pata de la cama
un palillo de dientes,
una guitarra.

Cualquiera de estas pequeñas cosas
se transforman
mágicamente
entre tus manos.

Murmullo del viento,
frágil sonido
que adormece los sentidos.